La adaptación de jornada regulada en el artículo 34.8 del Estatuto de los Trabajadores de España ha evolucionado como una medida de conciliación laboral y familiar. Sin embargo, no siempre las solicitudes de adaptación cumplen con los criterios de razonabilidad y proporcionalidad establecidos en la norma. En este blog, abordaremos este tema desde una perspectiva legal y empresarial, orientado a las necesidades y preocupaciones de los empresarios en España.
La adaptación de jornada es un recurso que permite a los trabajadores solicitar cambios en la duración, distribución y forma de prestar servicios, con el objetivo de conciliar su vida laboral y familiar. A diferencia de las reducciones de jornada, esta adaptación no implica una pérdida salarial.
El artículo 34.8 del Estatuto de los Trabajadores contempla una amplia variedad de fórmulas de adaptación, como asignar un turno fijo, cambiar la cadencia de turnos, distribuir la jornada de forma irregular, ajustar horarios o trabajar a distancia. Pero, todas estas adaptaciones deben cumplir con un requisito clave: ser razonables y proporcionadas, considerando las necesidades del trabajador y las organizativas o productivas de la empresa.
Razonabilidad y Proporcionalidad: Claves para la Evaluación
En ocasiones, las solicitudes de adaptación no cumplen con los criterios de razonabilidad y proporcionalidad. Esto se evidenció en las sentencia núm. 731/2022 dictada por la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Madrid el 19 de diciembre y núm. 521/2022 dictada por el Juzgado de lo Social nº 2 de Pamplona el 17 de noviembre de 2022, donde los trabajadores buscaban adaptar su jornada para atender a sus hijos y sus actividades extraescolares.
En estos casos, los tribunales concluyeron que las adaptaciones solicitadas no eran razonables ni proporcionadas, ya que las actividades extraescolares, aunque beneficiosas, son voluntarias y a elección de los padres. Por lo tanto, no se consideraban necesidades imperativas de salud o especiales.
Desafíos para Empresarios
La adaptación de jornada puede ser un desafío para los empresarios, ya que deben equilibrar las necesidades de los trabajadores con las de la empresa. Encontrar un encaje adecuado puede ser complicado. Por lo tanto, contar con asesoramiento jurídico especializado en este ámbito es esencial.
Las soluciones pueden ser colectivas o individuales, a través de acuerdos o, en última instancia, vía judicial. Analizar las necesidades de conciliación del trabajador, las necesidades organizativas o productivas de la empresa y la razonabilidad y proporcionalidad de la adaptación es crucial para tomar decisiones acertadas.
Conclusiones
La adaptación de jornada en España es una herramienta importante para la conciliación laboral y familiar. Sin embargo, su aplicación debe ser cuidadosamente evaluada para cumplir con los requisitos legales. Los empresarios deben considerar el equilibrio entre las necesidades de los trabajadores y las de la empresa, buscando soluciones que beneficien a ambas partes. En este proceso, el asesoramiento jurídico juega un papel fundamental para tomar decisiones acertadas y evitar conflictos laborales.
